La Norma ISO 50001 es una norma internacional que especifica los requisitos para establecer, implementar, mantener y mejorar un sistema de gestión de la energía, con el propósito de permitir a una organización contar con un enfoque sistemático para alcanzar una mejora continua en su desempeño energético, incluyendo la eficiencia energética, el uso y el consumo de la energía.
Herramienta para la mejora del desempeño continuo
El objetivo principal de la norma ISO 50001 es facilitar a las organizaciones, con independencia de su sector de actividad o su tamaño, una herramienta que permita la mejora del desempeño energético, los costes financieros asociados y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
La norma ISO 50001 puede ser utilizada de forma independiente pero también permite su integración en otros Sistemas de Gestión (ISO 9001, ISO 14001, ISO 22000) que existan en una organización porque está basada en los elementos comunes de dichas normas.
Exigencia de mejora continua del desempeño energético
La ISO 50001 no obliga a cumplir requisitos absolutos de desempeño energético, más allá de los compromisos establecidos en la política energética de la organización, y del cumplimiento de los requisitos legales.
La norma ISO 50001 se basa en el esquema de mejora continua (planificar-revisar-actuar) por lo que puede ser integrada en el funcionamiento habitual de cualquier organización, independientemente de su gestión actual de la energía.
Qué aporta la norma ISO 50001
Preguntas frecuentes:
El responsable de la implementación del Sistema de gestión de la energía debería tener conocimientos sobre los consumos y usos de la energía y la gestión de la energía en la organización. Por otro lado, también es necesario que conozca la estructura del Sistema de Gestión ya existente. Lo importante es tener en cuenta que los dos departamentos deben participar coordinadamente en el diseño y puesta en marcha del sistema de gestión.
Según el requerimiento 4.5.3 comunicación de la norma ISO 50001, la organización debe decidir si comunica o no externamente su política energética, el desempeño energético de su Sistema de Gestión de la Energía y el desempeño energético.
Por tanto, no es obligatorio comunicar datos energéticos, pero sí el documentar la decisión al respecto.
Para implementar un SGE es necesario dar cumplimiento al requerimiento de revisión energética de las instalaciones. Una auditoría energética es un buen punto de partida para un SGE pero no es el único método de llevar a cabo la revisión energética requerida por la Norma.
La integración de sistemas de gestión permite ahorrar recursos y tiempo de dedicación a los mismos. En cualquier caso, un sistema de gestión de la energía puede implementarse sin problema en una organización en la que no exista previamente un sistema de gestión implementado.
De acuerdo a la norma ISO 50001 es necesario que se documenten los siguientes puntos: política energética, planificación energética (revisión energética, línea de base energética, indicadores del desempeño energético, programa de objetivos), resultados de seguimiento y medición, evaluación del cumplimiento legal, resultados de la auditoría interna y de la revisión por la dirección.
Adicionalmente, la organización puede documentar todos aquellos requerimientos que considere oportunos.
No existe un tiempo predefinido, depende de muchas variables: tipo de organización, situación inicial en cuanto a planificación energética, complejidad de las instalaciones y procesos, tiempo y recursos dedicados a su implementación